Las personas poseemos la capacidad de ampliar/nos, expandirnos, lograr que el aire y nuevas posibilidades ensanchen nuestros pulmones y nos permita oxigenar nuestro cerebro y desde la metáfora vivificar ideas y emociones para sentirnos mejor, construir otras posibilidades, desarrollar alternativas, descubrir que somos capaces de ser y de hacer más de lo que creemos que podemos. Nadie puede hacerlo por nosotros, es una facultad indelegable que depende única y exclusivamente de cada uno.
En este sentido resulta invalorable la búsqueda de personas, espacios, ideas, teorías que nos ayuden a encontrar opciones para nuestra construcción continúa y la ampliación de nuestro ser. En algún momento antes o después la ampliación tiene que incluir a otros pocos o muchos con los que interactuamos dando y recibiendo lo que deba ser, lo que cada sistema particular requiera.
Soltarse… dar espacio a la intuición, incorporar los conocimientos teóricos a la práctica, escuchar/se…abrir, dudar…ampliarnos...resulta imprescindible para nuestro ser individual y para el mundo que habitamos que sin dudas requiere alternativas.
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